Si hay una cosa que diferencia a la cultura occidental respecto a la oriental es la impaciencia. El occidental siempre quiere resultados prácticamente inmediatos. Yo mismo soy culpable de ese error y creo que sigo cometiéndolo aunque ahora quizás de una forma algo mas consciente.
Es evidente que Roma no se construyó en un día. Las grandes cosas, los buenos resultados, la mejora de tu nivel como practicante no llegan de la noche a la mañana. Para llegar lejos hay que perseverar, de ahí el título del artículo «rápido significa lento pero sin pausa«. Tengo entendido, aunque no he podido comprobarlo, que es un proverbio Japonés y de hecho su significado encaja bien en su cultura, en la forma de afrontar los retos, en la forma de avanzar hacia un objetivo, etc. Va de la mano con aquello que comenté en su día de «la disciplina tarde o temprano vencerá a a inteligencia».
El juego de palabras es interesante, como practicante quieres avanzar rápido, todos queremos avanzar lo mas rápido posible y con la mejor calidad posible pero no todo el mundo está dispuesto a poner encima de la mesa la constancia necesaria para conseguirlo, no todo el mundo entrena sin pausa. Es mas, además de entrenar sin pausa también hay que hacerlo madurando lentamente los conceptos para que queden debajo de la piel.
¡Lento pero sin PAUSA!, ahí está la clave. En las fechas en las que estamos el curso empieza a pesar, cada día se hace un poco mas cuesta arriba y puede requerir un esfuerzo extra ponerse en marcha e ir al Dojo a entrenar. A mes de Junio ya no tenemos la misma frescura que en Septiembre al inicio del curso. Tus alumnos están cansados, tu compañeros están cansados, tu y yo estamos cansados y eso se nota.
Estar todo el año al pie del cañón es exigente, pero si te paras te costará mas arrancar de nuevo. Mejorar el nivel de karate no es labor de un curso o de un año, es algo que te exige constantemente, necesitarás toda una vida y a medida que avanzas pensarás que necesitarás todavía mas tiempo por lo tanto cada entrenamiento cuenta y como he dicho alguna vez, todo suma.
La constancia lo es todo, no solo en el arte marcial, personalmente creo que en todas las facetas de la vida. Humildemente creo que la forma de avanzar frente a esta adversidad es ponerse objetivos pequeños y que sean alcanzables para que podamos ver en nosotros mismos que esa perseverancia va dando sus frutos.
Realmente no hay mucho mas que decir y sin embargo mucho que hacer, pero antes de que te vayas al Dojo a entrenar me gustaría leer tu opinión en los comentarios:
- ¿Como llegas al final de tu curso marcial?
- ¿Como te motivas a motivas a tus alumnos para seguir en momentos de fatiga?
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Furinkazan Dojo 