Cuando te inicias en la práctica de un arte marcial lo primero que haces es absorber conocimientos. Es el comienzo y por alguna parte hay que empezar, empiezas a conocer las posiciones básicas, las técnicas básicas, etc. Pero una cosa es saber y otra muy distinta hacer.
Puedes estar toda una vida estudiando karate que si no lo practicas, (mucho y de formas muy diversas) no desarrollarás la habilidad adecuadamente. Esto que puede parecer trivial no lo es ni mucho menos, y en una actividad en la que participa prácticamente la totalidad de tu cuerpo como es el caso de una arte marcial, este hecho se magnifica.
Por tanto, si como practicantes marciales ya maduros que somos, nos hacemos la pregunta de ¿quién es mas listo, tu cerebro que absorbe miles de conocimientos o tu cuerpo que puede ejecutar algunos de ellos con precisión? ¿qué responderías?
De forma instintiva tendemos a relacionar inteligencia o astucia con el cerebro o la capacidad de discurrir. Y esto puede tener todo el sentido del mundo en actividades donde solo hay que pensar, donde no tienes que reaccionar con velocidad y donde el contexto en el que desarrollas dicha actividad no te genera incomodidad.
Pero en la práctica de un arte marcial es tu cuerpo quien debe reaccionar, muy probablemente con mucha velocidad y en situaciones de estrés como puede ser un combate. ¿Crees que en esa situación, será tu cerebro con su poderosa inteligencia el que te saque adelante?
En un combate de alto nivel el competidor no piensa que técnicas debe ejecutar, las ha trabajado y las ha practicado de tal manera que las tiene interiorizadas y es su cuerpo el que reacciona de forma prácticamente instintiva. En el articulo sobre las 4 fases del aprendizaje lo denominaba «competencia inconsciente».
El cerebro es un organo poderoso, capaz de hacer muchas cosas y casi todas ellas muy bien pero tiene dos grandes inconvenientes que le perjudican:
- Tiende a pensar demasiado y es fácil de distraer, por eso es importante estar focalizado en lo que haces
- A la hora de hacer algo «físico» que implica la utilización de más partes del cuerpo, es lento muy lento
Por otro lado el cuerpo, tu cuerpo en toda su dimensión y su contexto, es una máquina fascinante, y si lo entrenas adecuadamente puede realizar grandes cosas y de forma muy precisa. Pero para poder practicar bien Karate-Do y lo que es mas importante, para poder practicarlo de lo largo de muchas años, debes trabajar más en tu cuerpo y quizás no tanto en tu cerebro. Debes estudiarte a ti mismo y conocer cada parte, adquirir conciencia de cada músculo, cada hueso, cada tendón, cada fibra, etc … y así poder ir integrando cada vez mas elementos en tu practica.
¿Y cómo buscamos esto? no hay una receta mágica y yo personalmente solo puedo hablar de mi experiencia y de la de mis compañeros. Para nosotros la práctica habitual de Aoki Bioenergía nos ha abierto una puerta que nos ofrece:
- Bienestar, mejorar nuestra sensación de disfrute en la practica del arte marcial
- Conocimiento, ser mucho mas conscientes de partes de nuestro cuerpo que antes o bien no movíamos o no éramos conscientes de que se movían
- Control y regulación, aumentar nuestra movilidad, elasticidad, flexibilidad e ir desarrollando poco a poco la capacidad de mover todo nuestro cuerpo
Todo esto trabajado día a día se va introduciendo poco a poco en el subconsciente y pasito a pasito vamos avanzando en el camino del arte, pero ninguno de estos conceptos los gestiona el cerebro, todo ello va dirigido al cuerpo, por esa razón es por la que opino que tu cuerpo es mucho mas listo que tu cerebro.
Si has llegado hasta el final me encantará conocer tu opinión y te agradeceré que compartas el artículo en tus redes sociales.